Geografía

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UN VALLE PARA VIVIRLO
Imagen UN VALLE PARA VIVIRLO

El valle del río Ladrillar se halla en la zona oeste del sistema central, a los pies de la Sierra de Francia y es la zona más septentrional de la provincia de Cáceres, enmarcada por las Batuecas (Salamanca) a el norte, la Vega del Alagón a el Sur, la sierra de Gata y la Canchera a el Oeste y la Sierra de Cordón, río Batuecas y Alagón por el este. Es junto con Pinofranqueado, Caminomorisco, Nuñomoral y Casares de Hurdes, uno de los cinco concejos que conforman las Hurdes. Está compuesto por las Alquerías de Las Mestas, Cabezo, Riomalo de Arriba y el municipio de Ladrillar, actualmente cabeza de concejo.

El paisaje de el valle del río Ladrillar es áspero y montañoso, no permitiendo la formación de grandes concentraciones de población. Las características geográficas no favorecen la comunicación entre los distintos pueblos de Las Hurdes. Discurriendo las vías de comunicación paralelas a los cursos fluviales. En el termino municipal de Ladrillar se encuentran los tres picos más elevados de Las Hurdes, el Rongiero con 1624 m, Pico de la Granjera con 1462 m y Raigales con 1397 m.

La pobreza del suelo, el clima continental no muy extremado y la actuación del hombre, ha propiciado un tipo de vegetación característica, destaca la jara, el cantueso, el romero, el lentisco y el brezo entre las arbustivas. El pino, el castaño, el alcornoque, el tejo, el aliso y el madroño entre las arbóreas.

Ladrillar ha sido el concejo más olvidado de la región más olvidada de España, pero ni la Leyenda ni la pobreza ha podido animar a sus habitantes a abandonarla. Sino más bien a utilizar todo su ingenio para sobrevivir en ella, y es, ese olvido y ese ingenio de sus gentes, lo que hoy convierte a este maravilloso valle, en un paraíso natural, cultural y en un tesoro de sabiduría ancestral.

El concejo de Ladrillar recibe su nombre del río que lo baña y de su mismo nombre, denominado así por el poder destructivo de sus aguas en las épocas de lluvia ´´... que dejaba todo convertido en un ladrillar o escombrera, sus crecidas``, este río era denominado anteriormente río Malo por el mismo motivo. De ahí los topónimos de las dos poblaciones de su nacimiento y desembocadura, Riomalo de Arriba y Riomalo de Abajo respectivamente,

Al igual que Ladrillar, Las Hurdes reciben el nombre del rio que las divide: Hurdes Baja y Hurdes Altas, el rio Hurdano. Denominado así por la comunidad judía expulsada de Casar de Palomero y Hervás, que se refugió en estos valles. Le dieron el nombre de río Jordán en honor a el río de la Tierra Prometida. La corrupción de este nombre daría lugar a Jurdano, posteriormente Hurdano.